En el cierre de proyectos que realizó el Kínder, llamado: ‘Me cuido, cuido mi cuerpo y mi alimentación’ se destacó la activa participación de las familias y juntos exploraron actividades diseñadas para fomentar hábitos saludables desde temprana edad. Al mismo tiempo se fomenta la comunicación abierta y la participación activa de los padres en el desarrollo de hábitos saludables en sus hijos.
A través de actividades lúdicas, los pequeños aprendices no solo adquirieron conocimientos sobre higiene personal, sino que también disfrutaron de experiencias educativas divertidas que fomentaron la interiorización de estos hábitos.
La importancia del ejercicio fue resaltada mediante dinámicas que involucraron movimientos y diversión. Los niños participaron activamente, promoviendo la conciencia sobre la relevancia de mantenerse activos para un estilo de vida saludable.
Una parte fundamental del evento fue la enseñanza sobre la clasificación de alimentos. Los pequeños identificaron y diferenciaron entre opciones saludables y alimentos menos beneficiosos, promoviendo la toma de decisiones informadas desde una edad temprana.
Se reforzaron prácticas de higiene personal a través de actividades interactivas y didácticas. Los niños no solo comprendieron la importancia de cuidar su cuerpo, sino que también adquirieron habilidades prácticas relacionadas con el lavado de manos y el cuidado personal diario.
Los alumnos del kínder no solo adquirieron conocimientos teóricos, sino que crearon recuerdos duraderos a través de experiencias significativas. El cierre de proyectos dejó una impresión positiva y duradera en la mente de los niños, asociando la salud y el bienestar con momentos divertidos en familia.